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Canes ayudan a arqueólogos

Arqueólogos de la Universidad de Zadar usan el asombroso olfato canino para encontrar restos humanos prehistóricos.

Por Carolina Vásquez

El excepcional olfato canino ha sido muy útil a la hora de buscar a personas desaparecidas, drogas en los aeropuertos o incluso restos humanos en estado de descomposición. En Croacia, sin embargo, los arqueólogos de la Universidad de Zadar han dado un paso más y están utilizando a los perros para encontrar tumbas de hace 3.000 años a varios metros de profundidad.


Los perros localizaron el olor específico que tenemos los seres humanos y que es distinto al de cualquier otro animal. Los canes no solo ofrecen descubrimientos rápidos, también permiten encontrar las tumbas con precisión y reducen las probabilidades de dañar accidentalmente un sitio.


Los arqueólogos croatas comenzaron a utilizar perros en sus excavaciones desde 2015. Primero los probaron en tres tumbas ya descubiertas para ver si podían detectar el olor de los restos antiguos. Luego los soltaron en sitios con sepulturas potenciales y comenzaron a seguir su olfato desde entonces.

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